La contabilidad, según las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF), es mucho más que un simple registro de transacciones. Es un sistema organizado y preciso que permite registrar y controlar todas las actividades que afectan económicamente a una entidad, facilitando la comprensión de su situación financiera. Este conjunto integrado de conocimientos y habilidades técnicas proporciona claridad y exactitud, permitiendo una gestión efectiva de las operaciones comerciales diarias. Además, la contabilidad contemporánea se ha transformado en un sistema esencial para la toma de decisiones estratégicas, conectando de manera intrínseca la administración y la economía de las empresas. Gracias a su capacidad para medir, procesar y divulgar información financiera relevante, confiable y comparable, la contabilidad se convierte en una herramienta indispensable para alcanzar los objetivos empresariales y asegurar el éxito en la planificación a corto y largo plazo.
Registrar los movimientos contables de los productos y servicios financieros con la finalidad de establecer la situación económica y financiera de una entidad.